30 años y supervisando
Publicado 21.9.2022
Walter Breme hizo toda su carrera en Techint E&C. Hoy es supervisor en Fortín de Piedra y comparte algunos consejos con los más jóvenes: “Que se apoyen en los que estamos hace más tiempo en la empresa y que pregunten sin miedo”.
En el año 1993, Walter Breme con tan solo 24 años, ingresó a Techint E&C como oficial en el área de pintura en Servicios Siderúrgicos, para luego convertirse en encargado y, finalmente, supervisor en el año 2000. Durante los primeros años, se desempeñó en San Nicolás, ciudad de la que es oriundo, haciendo el mantenimiento para la planta de Ternium, a continuación, en Tenaris Siderca (Campana), y en Florencio Varela en Sidercolor, para Ternium nuevamente.
Siempre dentro de la misma área, trabajó en la planta de ácido en Ensenada para Ternium, donde junto a su equipo eran los encargados de realizar todas las terminaciones de pintura y trabajaban con productos químicos, para proteger del ácido tanto a los suelos como a las instalaciones.
El equipo hace el manteniendo de arenado, granallado, pintura y revestimiento de toda la planta, lo que representa una tarea fundamental, previo al inicio de las actividades, ya que asegura la protección y el mantenimiento de instalaciones y estructuras. “Somos los últimos que se van de la obra, dejamos todo en condiciones antes de que la planta empiece a funcionar. Ver todo terminado es algo muy gratificante”, explica.
Coordinación y prevención
Los desafíos son algo que Walter debió enfrentar a lo largo de su carrera en Techint E&C. Recuerda, por ejemplo, las reparaciones de los altos hornos, en la planta de Ternium en San Nicolás, en el año 1995: “Era un trabajo muy complejo con mucha cantidad de gente y todas las especialidades trabajando juntas. Fue un reto muy grande, yo era nuevo y aprendí muchísimo”.
El alto horno tiene 60 metros de altura, y es por eso que “había que trabajar sobre estructuras, por lo que la seguridad y la coordinación con otros equipos fue fundamental”. Además, participó en la aplicación de la pintura de los dos gasómetros, en el año 2016, donde el desafío estaba en el trabajo con gas y el cuidado de hacer las tareas con la planta en funcionamiento. “Es importante estar siempre atento al tema de la seguridad”.
En el año 2020, cuando comenzó la pandemia en la Argentina, Walter se encontraba trabajando en la ampliación de la central termoeléctrica Genelba, ubicada en Marcos Paz, provincia de Buenos Aires, que solo detuvo su operación por 15 días, y luego volvió a su ritmo habitual, aunque con estrictos protocolos sanitarios. “Teníamos que respetar el distanciamiento. No podíamos juntar las células, cada una tenía un horario de almuerzo y hasta viajábamos en camionetas separadas”. Y continúa: “Ver el proyecto finalizado, con todo lo que pasó en el medio, fue muy movilizante”.
Siempre el compañerismo
Actualmente, Walter se encuentra en la provincia argentina de Neuquén, donde continúa como supervisor de Pintura y Revestimiento para los distintos proyectos que tiene Techint E&C en Fortín de Piedra.
Está casado y tiene una hija que estudia medicina y un hijo en el último año del secundario. Quien tiene decidido seguir la carrera de abogacía. Cada franco aprovecha para visitarlos. “Siempre traté de inculcarles que hagan lo que les guste, pero que se formen para poder tener un mejor futuro”, resalta y cree en las capacidades de las nuevas generaciones: “A alguien que recién está empezando le diría que se apoye en los que estamos hace más tiempo en la empresa, que pregunte sin miedo, lo que sepamos le vamos a responder y enseñar porque eso le va a ayudar a ser un gran profesional”.
A punto de cumplir 30 años en la compañía, Walter destaca que el compañerismo y las ganas de querer lograr la metas y objetivos estuvieron siempre presentes. “En Fortín de Piedra tenemos un gran grupo, somos muy compañeros, nos llevamos muy bien y nos damos una mano entre todos. Con la jefatura sucede lo mismo, hay gente muy joven y dispuesta a escuchar y a trabajar en equipo. Siempre se vive ese sentimiento de acompañamiento y compañerismo”.