El yacimiento de Tecpetrol, Fortín de Piedra, ubicado en Vaca Muerta, en Neuquén (Argentina) alcanzó la producción acumulada de gas de 1 TCF. Su construcción también marcó un antes y un después para el país. Esta es la historia.

En el mes de febrero, Fortín de Piedra llegó a una producción acumulada de gas de un Trillón de Pies Cúbicos (TCF), una cifra récord que impresiona porque convierte al yacimiento en uno de los pocos que la alcanzó en el país y en el que más rápido logró hacerlo.

Hace siete años el viento era lo único que se movía en el agreste paisaje de la meseta donde ahora se alza la CPF (Central Processing Facility) de Fortín de Piedra, la planta que centraliza el procesamiento de todo el gas del área. Esta imponente construcción está compuesta de cientos de kilómetros de cañerías, de equipos separadores de gas, de tanques de almacenamiento, compresores, una planta de desalado y una de tratamiento de agua, entre muchas otras instalaciones.

Estaba todo por hacerse. Tecpetrol necesitaba que el proyecto Fortín de Piedra, es decir el diseño y construcción de las instalaciones de superficie para la extracción, tratamiento y transporte del gas producido en Vaca Muerta, estuviera terminado en dos años, pero Techint E&C logró hacerlo en el plazo de tan sólo 18 meses.

El yacimiento listo para operar se entregó antes del deadline gracias a la metodología de trabajo fast track, donde el diseño del proyecto y la construcción se realizan de manera simultánea y se superponen en forma ordenada actividades que normalmente se realizan en una secuencia rígida.

Se puso todo sobre la mesa. Esfuerzo, entusiasmo y una articulación de voluntades e iniciativas de gran volumen: 4.500 personas en pico de obra, 7.7 millones de horas de trabajo ejecutadas, 840 millones de dólares de inversión y más de 1.000 pymes de todo el país, muchas de ellas apalancadas por el programa ProPymes, orgullosas de pertenecer a este gran proyecto. Equipos yendo y viniendo, un hormiguero humano que transformaría el paisaje de la meseta neuquina para que, hacia mediados de 2018, la CPF ya estuviera lista para producir.

“Cuando comencé a trabajar en Fortín de Piedra en el año 2021, me asombró ver lo que se había logrado en tan poco tiempo de ejecución. Realmente fue una hazaña. En los años siguientes, seguimos trabajando en optimizaciones y ampliaciones para lograr procesar 24 millones de m3 de gas por día”, recuerda Sebastián Novillo, Regional Office Manager en Neuquén.

Por su parte, Martín Jiménez Álvarez, actualmente Sr. Project Manager en SADDN, comenta: “Viendo en retrospectiva a siete años luego del inicio del proyecto, a fines de marzo del 2017, (creo que hablo por todo el equipo que me tocó liderar) siento un enorme orgullo y agradecimiento por haber podido participar en una obra que hoy se ha transformado en un emblema del Grupo Techint y del desarrollo de Vaca Muerta.” Y agrega: “Todo lo que se hizo en tan poco tiempo sólo fue posible gracias a un equipo de excelentes profesionales que no solo volcaron toda su capacidad y esfuerzo en llevar adelante el trabajo, sino también al compromiso y orgullo de pertenecer a algo extraordinario para el Grupo y para el país”.

Terminaba la tarea principal de Techint E&C en una de las capitales mundiales del shale y, seis años después, ese gigante diseñado para procesar hasta 24 millones de m3 de gas por día llegaba a su primer TCF.

Las palabras de dos referentes de Tecpetrol como Ricardo Markous, CEO, y Martín Bengochea, Vicepresident Cuenca Neuquina & Vaca Muerta, son elocuentes. “Detrás de este número hay un esfuerzo extraordinario y la convicción sobre la necesidad de convertir las áreas no convencionales prometedoras de Vaca Muerta en fuentes de generación de energía para nuestro país”, se enorgullece Markous. En sintonía Bengochea dice: “Este hito es el premio al trabajo de un equipo gigante y el producto directo del desarrollo del yacimiento, en tiempo récord, gracias a la sinergia que nos da el ADN industrial del Grupo Techint”.

Como todo en el Grupo Techint, este hito no es inesperado, sino el resultado previsible de un gran equipo trabajando con la energía y apuntando hacia el mismo horizonte.