Diana Balaguer, Gerente de Ofertas de Ingeniería de Techint Ingeniería y Construcción: “Desde nuestra compañía arrancamos con grandes ventajas en en materia de transición energética. Nuestras experiencias previas nos han dado una gran experiencia para encarar los proyectos verdes”.

Diana Balaguer trabaja en Techint E&C desde hace 39 años. Si bien se desempeñó siempre en el área de Ingeniería, tuvo desde un inicio la posibilidad de participar activamente en grandes proyectos de la compañía en Argentina y alrededor el mundo.

Su desarrollo profesional da muestras de su espíritu transformador, siendo además una de las primeras mujeres ingenieras en la empresa. Al terminar sus estudios secundarios, basándose en su gusto por las matemáticas y la química, siguió la carrera de Ingeniería Química en la Universidad de Buenos Aires, Argentina.

Al poco tiempo de recibirse, Diana ingresó a Techint E&C en el departamento de Procesos, donde trabajó en tareas técnicas relacionadas al cálculo y al diseño a lo largo de 10 años. Con esta importante experiencia a cuestas, Diana empezó a dirigir su interés hacia las tareas de coordinación de Ingeniería “ya que me permitían tener una visión global de cada proyecto”, comenta.

Su primer trabajo como Jefa de Proyectos consistió en la coordinación de un emprendimiento para la refinería de Petrotrin, en Trinidad y Tobago. De ahí se incorporó a otros proyectos en Argentina, Uruguay y Chile, tras lo cual fue promovida a Gerente de Ingeniería y luego Gerente de Proyectos de Ingeniería y Suministros. Desde hace 10 años ocupa su actual puesto en la Gerencia Corporativa de Ofertas de Ingeniería.

Comenta que, en la primera etapa de su carrera, la palabra innovación no se usaba como tal. “En ese entonces nuestro principal objetivo era ir ganando experiencia; cada proyecto que desarrollábamos nos permitía aprender cómo hacerlo mejor, cómo hacerlo más económico, como hacerlo más rápido. Yo diría que la innovación era eso, era ir ganando experiencia en distintos proyectos, explorando la mejor forma de ejecutarlos”.

Para Diana, la innovación viene acompañada de algo nuevo que añade valor”. Y como ejemplo, plantea el fuerte impulso que la empresa ha encarado en los últimos años hacia la transición energética. Desde hace ya dos años que participa en los distintos proyectos de transición energética que Techint está realizando. “Aquí las posibilidades son enormes, aunque muchas de ellas se encuentran aún en etapa de investigación”, explica. “Estamos fuertemente comprometidos con el desarrollo de una industria sustentable que no sólo reduzca las emisiones de carbono, sino que también desarrolle tecnología de captura de emisiones durante los procesos productivos”, agrega.

Según Diana los actuales desafíos giran en torno al aprendizaje y la investigación. Techint E&C no solamente está avanzando en estudios de factibilidad de transición energética, sino también en el desarrollo de ingenierías conceptuales y básicas que, con el tiempo, se espera que se conviertan en proyectos ejecutivos . “Esto nos requiere evaluar permanentemente lo que se está haciendo en otras partes del mundo, mantener contactos con los tecnólogos y con empresas startups, viendo qué nuevos procesos proponen”, expresa. Se requiere una gran inversión en tiempo de capacitación y  desarrollo por parte de nuestro personal.

No es claro aún con qué velocidad avanzará  el mundo en el empleo de las tecnologías “verdes” , pero no tengo dudas de que el futuro será verde”, aclara.

En este camino de aprendizaje, Diana destaca el trabajo en equipo y el enfoque multidisciplinario de todas las empresas del Grupo Techint. “El equipo de transición energética, en donde participamos todas las empresas, o sea, Tecpetrol, Tenaris, Ternium, Tenova y Techint E&C, es personalmente mi primera experiencia donde participamos con un abordaje tan amplio y perspectivas tan distintas pero enriquecedoras”.

En este contexto, Techint E&C arranca con grandes ventajas. “Por la naturaleza de muchos de nuestros proyectos, hemos estado involucrados en el manejo y transporte de hidrógeno, en proyectos de amoníaco y de metanol tradicionales que tienen muchas similitudes con los proyectos verdes, en parques eólicos, en proyectos de hidrogenación de combustibles, en plantas de aminas, en estudios de impacto ambiental, etc., que han sido por décadas parte de nuestra competencia. Estos conocimientos nos posicionan muy favorablemente para encarar los futuros proyectos que la transición energética plantea”.