Más noticias

Desde un museo hasta un refugio de montaña: el recorrido de María Alejandra Rabuffetti en Techint Ingeniería y Construcción

Publicado 29.8.2023

María Alejandra Rabuffetti es Arquitecta de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y este año cumple 37 años en Techint E&C. Actualmente, desde su rol de Gerenta de Proyectos de Arquitectura, nos cuenta cómo fue su recorrido profesional, la variedad de proyectos en los que participó y las experiencias que la dejaron marcada para siempre. Cuando mira su trayectoria, su valor más preciado son las personas que la fueron acompañando en el camino.

Inauguración · Refugio Rocca

¿Se podría decir que estuviste en Techint desde siempre?

Prácticamente sí… entré en la empresa en 1986 recién recibida. Hice el programa de Joven Profesional (JP), después el de Profesional Joven, luego fui senior y jefa de Proyectos. En el año 2000, comencé a liderar el equipo de arquitectos, y desde 2019 soy Gerenta de Proyectos. Siempre trabajé en el sector de Arquitectura, en la Gerencia de Ingeniería Civil.

¿En qué proyectos participaste?

En muchos, variados y bien diferentes, algunos hasta insólitos, se podría decir. Si bien el core de la empresa son los proyectos industriales y hemos trabajado en oleoductos, petroquímicas, centrales termoeléctricas, refinerías, siderurgia, entre otros, también hemos participado, por ejemplo, en proyectos como la remodelación del Museo Nacional de Bellas Artes, la remodelación del Teatro Coliseo, la construcción del Museo de Arquitectura que donó Ternium a la Sociedad Central de Arquitectos, estudio de factibilidad para la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Buenos Aires (UBA). Son tantos los proyectos y tan enriquecedores, que el tiempo se pasó volando.

Refugio Rocca · en el Tronador

¿Qué proyectos sientes que te marcaron?

Por su relevancia, en primer lugar, puedo destacar la cárcel de Ezeiza, que hicimos entre 1998 y 2000 en Argentina. Realizamos la propuesta técnica para la licitación, la ingeniería básica y de detalle. Era un diseño de arquitectura que no conocíamos, con detalles complejos, y tuvimos que viajar a conocer diferentes cárceles de Latinoamérica. El proyecto salió muy bien, tuvimos un gran equipo y luego fuimos a dar charlas y presentaciones sobre la obra en varias oportunidades.

En segundo lugar, el edificio de La Nación- actualmente Torre Bouchard Plaza-, que hicimos entre 2000 y 2003, donde estamos trabajando actualmente. Éste era el edificio del diario, que tenía 6 pisos y le pusimos una torre de 17 pisos arriba. La redacción trabajaba 24 horas, así que tuvimos que coordinar bien los trabajos para preservar a las personas.

También hicimos el edificio corporativo de Neuquén, entre 2019 y 2021, donde hay oficinas de Tenaris, Exiros, Tecpetrol y Techint E&C. Ahí tuvimos la pandemia en el medio, pero siempre que algo nos atraviesa, hay que sortearlo con entusiasmo.

Y por su significado emotivo, ¿puedes destacar algún proyecto?

Sin duda, el refugio andino Agostino Rocca, que se hizo en 2012. Fue una donación de la Organización Techint en honor a Agostino Rocca, que era un gran amante de la montaña y de nuestra Patagonia. Le empresa se lo donó al Club Andino Bariloche, para hacerlo en el cerro Tronador, en el Paso de las Nubes. Fue un proyecto muy interesante por todo lo que significaba emocionalmente para la compañía y por lo diferente que era para mí, que hasta ese momento era una persona muy de ciudad. Tuve que viajar varias veces a Bariloche para hacer el control del proyecto, y allí me puse en contacto con especialistas y expertos en montaña. Recuerdo los trekking para subir al Tronador, aproximadamente 14 km de ida y de vuelta, un camino que me habían dicho que iba a demorar seis horas, y finalmente lo hice en tres. Llegué, pero mejor no me preguntes cómo caminaba al día siguiente, jaja.

Inauguración · Carcel de Ezeiza

Participaste como oradora en el Congreso Internacional de Ingeniería, ¿qué te gustaría destacar de esa experiencia?

En 2010 participé de ese congreso, puntualmente en el Foro de la Mujer. Estuve en la organización desde Techint, colaborando con el Centro Argentino de Ingenieros, como moderadora del panel de La mujer en la Ingeniería y la empresa. En esa ocasión, en conjunto con la Gerencia de Diversidad de Género de Tenaris, que ya venía trabajando temas de estrategia para atraer, promocionar y retener a la mujer en la empresa, presentamos un trabajo sobre diversidad de género y nos fue muy bien: se seleccionó para ser expuesto y nos dieron un reconocimiento por la excelencia del trabajo presentado.

Lo que más rescato de esta experiencia es cuánto necesita el mundo de los ingenieros, ya sean hombres o mujeres, por eso la importancia de atraer a las mujeres hacia esas profesiones y cargos que suelen ser de preferencia masculina, y la relevancia de que los niños y niñas conozcan y se interesen por la Ingeniería desde pequeños.

Si miras todo tu recorrido profesional, ¿hay algo que destaques especialmente como relevante para tu desarrollo?

¡Las personas que me acompañaron en el recorrido! Nuestra empresa tiene gente increíble, en todos los niveles, muy generosa y buena, y gracias a eso pude crecer. En mi caso, aunque muchas personas súper valiosas me ayudaron en el transcurso de los años, destaco puntualmente dos mentores: Enrique Hermann, que me ayudó desde muy jovencita, me llevaba a las obras, me estimulaba a crecer y a seguir estudiando, y Andrés Lorenzo, que lamentablemente falleció joven, con quien participé de proyectos muy importantes como la Cárcel de Ezeiza y el edificio La Nación, era un gran armador de equipos.

La Nación (TBP) · Colado de última losa piso 23°

Construcción de la · Torre Bouchard Plaza (TBP)

¿Qué consejo le darías a las y los jóvenes profesionales que recién están arrancando?

Les diría que se involucren y trabajen de manera colaborativa: que investiguen, que hagan vínculos, que compartan información, que sean pacientes y se enfoquen en aprender. También les recomendaría que busquen un mentor, que no tiene que ser formal necesariamente, pero puede ser un líder que les enseñe y los acompañe. En el programa de JP aprendí algo que aplico y aconsejo al día de hoy: la importancia de automotivarse. Siempre hay que ir más allá de lo que se pide, poner el alma y generar vínculos, porque ahí siempre surgen más oportunidades.

¿Consideras que hay algún ingrediente especial que garantice el éxito de un proyecto?

El éxito depende de múltiples factores, cumplir con la planificación, el costo y la calidad, pero creo que el disfrute ayuda mucho. Siempre digo que, si lo disfrutas, sale bien. Por eso hay que disfrutar los proyectos.

 

También te puede interesar:

Mariana Zalazar: “Nunca es tarde para animarse a hacer las cosas pendientes”

“Llevo a Techint en la sangre”

“Techint E&C genera ganas de crecer, de potenciarte y de aprender”

Noticias relacionadas

Ver más noticias